lunes, 25 de marzo de 2013

VIVIR SANAMENTE EL PASADO

 

Dos historias de la vida cotidiana: Felipe está en tratamiento psiquiátrico por una depresión. Su discurso siempre es el mismo: recuerda con tristeza los años de infancia y juventud y los malos tratos que recibió de su padre alcohólico. Insiste: “tengo la imagen de mi padre golpeándome con el cinto, que no me deja un instante”. Aunque ha conseguido una buena posición económica y social y tiene una familia con tres hijos maravillosos y se siente querido y valorado por su mujer, su pasado enturbia su presente. No puede ser feliz.

En el otro extremo se encuentra Antonia: siempre preocupada por lo que va a ocurrir. Su hijo de dieciocho años no sabe si encontrará trabajo, a su marido, que lleva veinte años en la empresa teme que le despidan (aunque por el momento no hay ningún dato que indique que eso pueda ocurrir) y además se encuentra en un continuo sobresalto por el temor a que pueda repetirse una arriada que destruya sus campos de cultivo, que posee. Todas estas vivencias ocasionan un gran sentimiento de ansiedad y no puede concentrarse en la lectura y últimamente ha comenzado a tener insomnio.

Felipe y Antonia son dos maneras de vivir en función del calendario; uno permanece en el pasado y la otra quiere adelantarse al futuro. Ambos no viven el presente sino que están o en el triste pasado o proyectándose con ansiedad en el futuro.

El riesgo del pasado es que sea tan abrumador que paralice el presente o que impida un presente saludable. Así lo describe gráficamente Ionesco en una de sus obras, donde un hombre compra un piso nuevo y lo llena de muebles viejos, que prácticamente no deja sitio para caminar. Esto mismo ocurre cuando el pasado está omnipresente en el momento actual. Debemos, pues, aprender a seleccionar y saber soltar amarras para que el presente no se encuentre en el vacío ( sin historia) pero tampoco paralizado por el pasado.

El pasado de cada persona es el soporte del presente. Es más: el pasado es donde se fabrica el presente. Además cada pasado es intransferible: las experiencias, los hechos, las circunstancias que cada individuo ha vivido son irrepetibles y además propias. De alguna manera somos en tanto en cuanto hemos vivido, pero también en tanto en cuanto programamos nuestro futuro.

Sin embargo, aunque es cierto que no podemos vivir sin el pasado, no podemos quedar enganchados, como peces en una red, de las experiencias anteriores por muy traumáticas que hayan sido.

Los recuerdos, pues, como parte de nuestra existencia deben estar presentes en cada momento, pero no pueden ser las únicas fuerzas para seguir viviendo. “De recuerdos no se vive” se suele decir, pues provocaría anquilosamiento y retroceso psicológico. Es más, si eso ocurriera nos podría ocurrir lo que la Biblia relata de la mujer de Lot, que se convirtió en estatua de sal, es decir, que nos podríamos quedar petrificados en el pasado, sin opciones para progresar y crecer.

Vivir sanamente el pasado es rescatar aquellas experiencias que han servido como trampolín para el crecimiento psicológico y rechazar aquellas otras que han sido traumáticas y no han podido ser metabolizadas y aprovechadas para conseguir un equilibrio saludable.

Alejandro Rocamora Bonilla

Psiquiatra

domingo, 24 de marzo de 2013

RIQUEZA INTERIOR

 

Plata en los cabellos.

Piedras en los riñones.

Azúcar en la sangre

Plomo en los pies.

Hierro en las articulaciones.

Y una fuente inagotable de Gas Natural en el vientre.

¡¡¡Nunca pensé que a partir de los 50

pudiera llegar a tener tanta riqueza interior!!!

MAFALDA

sábado, 23 de marzo de 2013

¿HOJA DE RECLAMACIONES U HOJA DE AGRADECIMIENTO?

 

Hace unos días cenando con unos amigos surgió el tema de la necesidad de protestar, y dejarlo por escrito, cuando nos sintiéramos maltratados por un dependiente, un médico o cualquier funcionario. Alguien enfatizó la necesidad de exteriorizar nuestro malestar cuando algo nos molestara, pues esto potenciaba nuestra autoestima y fortalecía nuestros derechos ante los demás. La conversación derivó en mil y un ejemplo en los que los comensales expresaban su “valentía” al haber protestado ante el retraso del autobús, la atención en la consulta médica y en muchas más situaciones. Parecía como si el que más protestara o denunciara fuera más auténtico, más poderoso o más persona. En un extremo alejado de la mesa una mujer que hasta ese momento no había abierto la boca, dijo de forma sencilla: “Por mi parte, cuando acudo a un centro comercial o a un taller o a un hospital, etc. siempre que me siento bien atendida procuro recompensar a mi interlocutor con una sonrisa y además después hago una llamada al Servicio de Atención al Cliente del centro para expresar mi agradecimiento…” Se produjo un tenso silencio como si un extraterrestre hubiera entrado en la sala.

Hoy al recordar esta anécdota considero que hemos pasado de un asumir todo lo que nos ocurre (no protestar por nada, propio de una sociedad dictatorial) a protestar por todo (en una sociedad democrática). Esto último, considero que es sano: ser capaz de protestar y denunciar cuando consideramos que nuestros derechos han sido pisoteados, pero recordando la cena con mis amigos, considero que el mundo sería mejor, si junto a la Hoja de reclamaciones existiera una Hoja de agradecimiento, por el buen trato recibido.

Es más, imaginaos como sería el mundo si en la familia, en el trabajo, en la relación con los amigos, en el contacto diario con el panadero, carnicero o el barrendero de nuestro barrio, por poner solo unos ejemplos, existiera una Hoja de agradecimiento por la buena comida que nos ha sido preparada, o por la sonrisa con la que nos vende el periódico o la carne o el pescado o por lo limpia que está la calle, por poner solo unos ejemplos. Estaríamos en un mundo más humano.

Al finalizar la cena, donde había sido tratado con gran profesionalidad y con gran amabilidad, miré a nuestro camarero y con una gran sonrisa exclamé: “Gracias, por su agradable atención”. Entonces pensé que la revolución de la Hoja de agradecimiento había comenzado.

Alejandro Rocamora Bonilla

Psiquiatra

viernes, 22 de marzo de 2013

jueves, 21 de marzo de 2013

LOS CINCO LENGUAJES DEL AMOR

Los cinco lenguajes del amor

Hace unos días en una reunión con profesionales de la psicología se planteo la cuestión de la importancia de la armonía entre la pareja para conseguir una familia sana. Entonces me vino a la cabeza la teoría del terapeuta de pareja Gary Chapman sobre los cinco lenguajes del amor. En definitiva este autor afirma que la armonía familiar está en función de si todos los miembros de la familia utilizan el mismo lenguaje de amor. De la misma manera que la mejor forma de entendernos en un país extraño es cuando hablamos el mismo idioma, así también en el pequeño mundo familiar es imprescindible utilizar el mimo lenguaje de amor.

Esta teoría dice así: no todas las personas expresamos nuestro amor de la misma manera. Para este autor lo podemos sinterizar en cinco formas: 1) A través de la palabra: por ejemplo: “Ese vestido te sienta muy bien”, “La comida te ha salido perfecta”, etc.; 2) La renuncia: “como a ti te gusta la playa, pues iremos a la playa”; 3) Los regalos: el detalle de una flor, una entrada para el teatro, o un fin de semana en cualquier lugar; 4) Actitud de servicio: “ir a recogerte en coche”, “ayudar en las tareas domésticas”, etc.; 5) Contacto físico: las caricias y no solamente con un connotación sexual sino al cogerse de la mano por la calle, abrazarse en un paseo, etc. Todas estas formas pueden servir para la convivencia siempre y cuando hablemos el mismo lenguaje. Lo importante pues no es el lenguaje en el que yo expreso el amor sino si la otra parte está en la misma onda.

El problema surge, pues, cuando cada miembro de la pareja o de la familia utiliza un lenguaje de amor diferente: el que prioriza la palabra no entenderá el contacto físico como cariño sino quizá como agobio; de la misma manera el que expresa su amor a través de la renuncia no comprenderá el mensaje de los regalos, por poner solamente algunos ejemplos.

Es por esto que con demasiada frecuencia aunque dos personas se quieran se pueden sentir incomprendidas y abocadas a la ruptura. Por esto, querido lector, te animo a un ejercicio de reflexión: cada miembro de la pareja o de la familia se puntúa de 0 a 10 en los diferentes lenguajes del amor. Después los resultados se confrontan con el otro y a partir de las diferencias que se observen habrá que trabajar para que todos hablen el mismo lenguaje de amor. Animo y a la búsqueda de la armonía, que será la antesala de la felicidad.

Alejandro Rocamora Bonilla

Psiquiatra

miércoles, 20 de marzo de 2013

Las llamadas con contenido suicida aumentaron un 29,5% en 2012 respecto al año anterior

 

Foto de Las llamadas con contenido suicida aumentaron un 29,5% en 2012 respecto al año anterior

El pasado año, los voluntarios del Teléfono de la Esperanza atendieron 1.567 llamadas de personas que querían quitarse la vida
En 2012, los voluntarios de los Centros del Teléfono de la Esperanza en España atendieron 99.825 llamadas. En 1.567 de ellas, los llamantes manifestaron de forma explícita su intención de querer quitarse la vida. Las llamadas con contenido suicida suponen, por tanto, un 1,57% del total de llamadas recibidas en los Centros que el Teléfono de la Esperanza en 25 provincias españolas. En 2011, estas llamadas con contenido suicida alcanzaron la cifra de 1.210, lo que significó el 1,25% del total de llamadas atendidas.
De las 1.567 llamadas con contenido suicida, un 3,2% (50 llamadas) las realizaron personas que estaban llevando a cabo un intento de suicido en el momento de la llamada. Personas que estaban sometidas a una crisis emocional y habían decido suicidarse como salida a la misma, fueron las responsables del 18,7% de las llamadas (293). Y en un 78,1% de los casos (1.224) se trataba de personas en crisis ideando la posibilidad del suicidio.
En el estudio del perfil de los llamantes que amenazan con quitarse la vida, una mayoría de ellos, el 73,88%, no mantienen en esos momentos ninguna relación sentimental o de pareja lo cual apunta a una relación muy estrecha entre la soledad y el suicidio. Se trata de personas solteras en el 45,86% de los casos, separadas o divorciadas en el 23,75%, y viudas en el 4,26% de las ocasiones.
Por el contrario, el 16,95% de las llamadas con contenido suicida fueron realizadas por personas casadas, y el 2,87% por llamantes que tenían una pareja de hecho. En el 6,2% de las ocasiones el llamante prefirió no dar detalles sobre su estado civil.
En cuanto a la edad de las personas que llaman en el momento de llevar a cabo el intento de suicidio (inmediatamente tras ingerir un bote de pastillas, por ejemplo), la mayoría tiene entre 35 y 44 años (32% de estas llamadas). El 20% de los llamantes con un suicidio en curso se encuentra en el grupo de 45 a 54 años; un 16%, entre 25 y 34 años, otro 16%, entre 55 y 64 años; mientras que los grupos de hasta 25 años y a partir de 65 años representan cada uno un 4% de las llamadas avisando de un intento autolítico.
Las llamadas con contenido suicida son efectuadas en el 64% de las ocasiones por mujeres y en el 36% por hombres. Este dato evidencia que en situaciones de crisis emocional a las mujeres les cuesta menos solicitar ayuda psicológica, mientras que a los hombres les produce más vergüenza reconocerse necesitados.
Aunque las mujeres intentan suicidarse con una frecuencia mayor que los hombres, éstos consuman el suicidio en una proporción entre tres y cuatro veces mayor que ellas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que “el suicidio no es sí una enfermedad, ni necesariamente la manifestación de un enfermedad, pero los trastornos mentales son un factor muy importante asociado con el suicidio”. En este sentido, la OMS (año 2000) estima que el riesgo de suicidio en personas con alteración de su estado emocional, principalmente depresión, (trastornos del humor) es entre el 6 y el 15%; con esquizofrenia, entre el 4 y el 10%; y con alcoholismo, entre el 7 y el 15%.
En España, el suicidio se ha convertido en la primera causa de muerte no natural, lo que deja la trágica estadística de que cada día diez personas se quitan la vida en nuestro país.
Estamos hablando solo de suicidios consumados, ya que los intentos, frustrados conscientemente o por intervención ajena, y los parasuicidios (conductas de riesgo al volante, ingesta de drogas y alcohol, no prevención en el contagio de enfermedades infecciosas, autolesiones, accidentes inexplicables, etc.), que no contabilizan como suicidios consumados, representan unos 50 casos por cada uno especificado como realizado voluntariamente.
Las terribles noticias que nos vienen informando de personas que, poco antes de ser desahuciadas, deciden quitarse la vida debido al intenso sentimiento de desamparo y al estado de profunda crisis emocional, nos aconsejan recordar a la sociedad española que el Teléfono de la Esperanza ofrece un servicio permanente y gratuito de Orientación por teléfono para abordar de forma urgente, anónima y especializada las situaciones de crisis. Este servicio, que funciona las 24 horas del día, durante los 365 días del año, está atendido por voluntarios especializados en la escucha y formados para activar las capacidades de las propias personas para superar sus problemas.
Además del servicio permanente de Orientación por teléfono, nuestra Asociación ofrece asesoramiento e intervención profesional en entrevista personal. Este servicio es prestado por un equipo multidisciplinar formado por psicólogos, psiquiatras, abogados, trabajadores sociales y otros especialistas.
El Teléfono de la Esperanza es miembro de pleno derecho de IFOTES (Federación Internacional de Ayuda de Emergencia por Teléfono) y de IASP (Asociación Internacional de Prevención del Suicidio) y, a través de éstas, está vinculada formalmente con la OMS. En España, es miembro fundador de la Plataforma del Voluntariado.
Con la inicio del servicio en Santander este mismo año, el Teléfono de la Esperanza ya está presente en España con al menos una sede en 26 provincias:

España
902 500 002

Ciudad

Teléfono

Albacete

967 52 34 34

Alicante

96 513 11 22

Almería

950 26 99 99

Badajoz

924 22 29 40

Cáceres

927 62 70 00

Castellón

964 22 70 93

Granada

958 26 15 16

Huelva

959 28 15 15

Jaén

953 26 09 31

Las Palmas de Gran Canaria

928 33 40 50

León

987 87 60 06

Logroño

941 49 06 06

Madrid

91 459 00 50

Málaga

95 226 15 00

Murcia

968 34 34 00

Oviedo

985 22 55 40

Palma de Mallorca

971 46 11 12

Pamplona

948 23 70 58

Salamanca

923 22 11 11

Santander

942 36 37 45

Santiago de Compostela

981 51 92 00

Sevilla

95 457 68 00

Toledo

925 23 95 25

Valencia

96 391 60 06

Valladolid

983 30 70 77

Zaragoza

976 23 28 28

domingo, 17 de marzo de 2013

El valor de la risa y las actitudes positivas en la educación

 

Foto de El valor de la risa y las actitudes positivas en la educación

“La raza humana tiene un arma verdaderamente eficaz: la risa”

Mark Twain

En muchas ocasiones tenemos la idea equivocada de que lo importante no es divertido. Pero probemos a emplear la risa y las actitudes positivas con frecuencia, acompañando a lo que hacemos, los resultados serán más efectivos.  En la educación la risa y las actitudes positivas tienen un importante valor en muchas ocasiones desestimado.

¿Qué nos aporta la risa y las actitudes positivas?

  • Constituyen el mejor remedio natural contra el estrés y la tensión. La risa hace que nos relajemos y que liberemos tensión. Que veamos las cosas de otra manera.
  • Tienen un importante valor para expandir el conocimiento. Las actitudes y pensamientos positivos nos alientan para superar retos y lograr nuestras metas y no quedarnos atascados en el yo no puedo, si hacemos ver una dificultad con humor, damos la fuerza para superar esa dificultad y a la larga se amplía el conocimiento.
  • Estimulan el aprendizaje, los niños y niñas aprenden con el juego, el entretenimiento y la diversión.
  • Favorecen la creación de vínculos emocionales. La alegría hace que nos sintamos bien y el sentirnos bien nos une a las personas que tenemos cerca en ese momento que hacen que nos sintamos bien y que comparten esos momentos de alegría.
  • Contribuyen al desarrollo emocional sano y a un desarrollo cognitivo efectivo. Las actitudes positivas fomentan las emociones positivas, y ambas fomentan el desarrollo.
  • Favorecen una sana autoestima. Es importante saber reírse y ver las cosas desde un punto de vista positivo para tener una sana autoestima.
  • Hacen que tengamos pensamientos positivos. Si la actitud es positiva el pensamiento es positivo.
  • Refuerzan las habilidades sociales. Estar relajados y positivos contribuye a relacionarnos de forma efectiva.
  • Favorece la concentración. Estar alegre y en un ambiente relajado hace que la concentración sea más efectiva.

Una actitud positiva, nos va a ayudar a tener pensamientos positivos y a eliminar los negativos, de esta forma veremos las dificultades desde un punto de vista optimista. Esto contribuye a no centrar el problema en nosotros mismos, a ver más puntos de vista. Y así tenderemos a buscar soluciones, creeremos que estas son posibles y dispondremos de fuerzas y energía para llevar a cabo la solución.

Es por ello que se hace imprescindible emplear las actitudes positivas y su expresión en forma de risa para la educación de los más pequeños. Ya que enriqueceremos el proceso educativo y el desarrollo de los niños y niñas.

Pautas para educar con una actitud positiva

  • Establece buenas relaciones con los demás. Si creas un ambiente de relaciones positivas y alegres, los niños y niñas se sentirán relajados y cómodos y las actitudes positivas surgirán de manera natural.
  • Préstale Tiempo y atención suficiente. Dedica tiempo de calidad a los pequeños, juega con ellos, cuéntales un cuento, ríe, habla, escúchales, etc. Deja a un lado las preocupaciones y dedícales unos momentos relajados, divertidos, sin tensiones.
  • Sé empático con ellos, ponte en su lugar, no les juzgues entiéndelos. Si se sienten comprendidos se sentirán cómodos para expresar sus actitudes positivas.
  • Utiliza un estilo de educación congruente y coherente. Evita mandar mensajes contradictorios a los pequeños. Es importante que seas coherente, si no permites determinada actitud no la permites nunca, que no dependa de tu estado de ánimo o cansancio.
  • Emplea unos valores compartidos por todos los miembros de la familia. Es fundamental que tanto el padre como la madre sigan una misma línea educativa. Así como todos los miembros de la familia. Las contradicciones generan sentimientos y actitudes negativas.
  • Muéstrate con naturalidad, en todo momento deja que tus actitudes surjan, no fuerces una actitud positiva, relájate primero y después deja que salgan las actitudes.
  • Sirve de ejemplo, no escatimes en sentido del humor. Ríete a menudo, bromea, juega canta. Muestra ante los problemas una actitud positiva, no te dejes desanimar. Los niños y niñas aprenden más de lo que ven que de lo que les dice.
  • Dialoga con los pequeños cuando se les presente una dificultad o problema, muéstrale pensamientos positivos acerca de esta situación particular.
  • Motívale, hazle ver que puede, si tú crees que pueden, ellos creerán que pueden, tendrán la actitud positiva que necesitan.

Los niños y niñas que crecen en un ambiente alegre y positivo, tomarán esas actitudes en sus vidas futuras. Si queremos educar a los niños y niñas para que sean brillantes, debemos educarlos en el buen humor, en las actitudes positivas y sanas que fomenten su alegría y su risa.

A veces cuando vemos a personas felices creemos que lo son porque todo les va bien, pero deberíamos pensar que tal vez todo les vaya bien porque son alegres y tienen actitudes positivas como un estilo de vida.

AUTORA. Celia Rodríguez Ruiz

sábado, 16 de marzo de 2013

Voluntarios del Teléfono de la Esperanza en Euskadi reciben formación para atender llamadas desesperadas

Ningún WhatsApp puede suplantar una voz que auxilie, ningún correo electrónico puede ayudar a ver la luz al final del túnel. El Teléfono de la Esperanza es el barómetro del estado emocional de los ciudadanos, un estado tambaleante que más que nunca se precipita al vacío. Por eso, en Bizkaia se está gestando un equipo de cuarenta voluntarios capaces de atender llamadas desesperadas, voces angustiadas que buscan refugio al otro lado del hilo telefónico. "Nuestro objetivo es despertar en esas personas su capacidad para salir adelante", asegura Fátima Montenegro, una de sus principales valedoras.

Con el suicidio de Sarriko azotando la memoria, no pueden evitar pensar qué hubiesen hecho si José Antonio, antes de estar en el quicio de la ventana, hubiera estado al otro lado del aparato. "Si hubiese llamado a nuestro teléfono, significaría que no había tirado la toalla y buscaba ayuda", dice Marijose Zorrilla, tratando de insuflar esperanza. "Lo importante es que si alguien tiene una angustia, no dude en llamar. Es necesario saber que todos tenemos herramientas para afrontar situaciones que no nos hagan tirarnos por la ventana. Es una pena que esas personas que han hecho algo tan terrible no hayan contado con alguien. Nuestro mensaje es que la gente sepa que estamos aquí", dice Fátima, informando que aunque Bizkaia no cuenta con un servicio propio, siempre se puede recurrir al 902500002 que tiene coste de llamada local.

Como las tentativas de suicido apenas ocupan diez de cada cien llamadas, también se ponen en papeles difíciles como esa hipotética llamada de una mujer maltratada. "No hay ni que moralizar, ni que juzgar ni que aconsejar. Hay que acogerla, escucharla e intentar entenderla", explica Marisa Puente. Ni el boom de las nuevas tecnologías, ni la evolución de los medios de comunicación ha conseguido relegar el valor social del Teléfono de la Esperanza. Conscientes de que solo la buena voluntad no es suficiente, la formación ocupa ahora todo su tiempo. "Esta etapa es de vital importancia ya que tienes que sacar fortaleza de ti mismo para poder dársela al de enfrente", explica Fátima, aclarando que, "dentro del teléfono hacemos atención en crisis, promoción de salud emocional y también formación de agentes de ayuda y formación de voluntarios y de otras personas que quieran colaborar".

"Es muy importante aprender a ver cómo nos afecta una mala situación, y es nuestra interpretación la que va ayudarnos a adoptar una actitud u otra", explica Marijose en un cursillo acelerado de positivismo. No en vano, Marijose considera que "la inteligencia emocional es más importante que el coeficiente de inteligencia, pero nadie nos ha enseñado a identificar las emociones y los sentimientos", señala.

Inés Echévarri, usuaria

"Cuando llamas al teléfono sientes que sujetan tu angustia"

Inés Echévarri cuenta en primera persona su experiencia con el Teléfono de la Esperanza hace ya varios lustros. "Tenía veintitantos años, hijos pequeños y, de repente, mi relación de pareja se rompió. Me parecía que se iba a hundir el mundo. Son momentos en los que te sientes en una encrucijada terrible y me vino a la cabeza el teléfono de la esperanza", confiesa Inés Echévarri. "Vivía en una ciudad sin familia, sin amistades y no podía contar mis problemas a nadie. Así que llamé por necesidad. El hecho de que tú verbalices tus problemas, te ayuda a aclarar las ideas y a ordenar tus pensamientos. Además, a veces, no ayuda la respuesta, es la escucha activa porque sientes que están sujetando tu angustia", revela esta usuaria y ahora espontánea de la línea.

Contra todo pronóstico, los voluntarios no son de una pasta especial, aunque la solidaridad, la empatía y la cercanía con el prójimo sean condición sine qua non para aliviar congojas y quitar pesadumbres. "Yo siempre he asociado el teléfono de la esperanza con la desesperación. Aunque ahora sé que no hace falta llegar a casos extremos. Una persona puede llamar muy abatida porque se le ha muerto el gato y porque esa mascota era su única compañía", argumenta Marisa.

"Con una llamada no podemos arreglar la vida de la gente, sino decirles; tú tienes herramientas, a ver si podemos ponerlas en marcha", relata Fátima. Marijose cree firmemente que "es la persona la que encuentra la solución, tú no se le das". "Cuando alguien se siente escuchada al otro lado del teléfono, esa persona se siente acogida, se siente liberada. Una mujer maltratada no está poniendo los límites. A través de la escucha intentaremos despertar en ella la fortaleza que no está sabiendo sacar. Hay que quitar miedos y sacar el coraje para poder salir de esa situación", conciencia Fátima.

Aunque en el planeta de los sentimientos, las mujeres son las grandes protagonistas. Carlos García opina que "nunca me he visto más cojo en el mundo de las emociones a pesar de ser un hombre"

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Más de 140.000 llamadas en 2012

"Detrás de las personas que llaman hay mucha soledad"

Fátima relativiza las angustias. "Detrás de esas personas que llaman hay soledad y hay problemas cotidianos con su marido, con su hijo... porque la mayoría son personas normales con problemas normales, y sobre todo hay cada vez más gente joven que llama entre 25 y 35 años", subraya. "Creo que hay gente que vive angustiada pero que está en un estrato alto a nivel laboral o a nivel social y les resulta muy difícil abrirse en su entorno. Aunque tengas trabajo, en las empresas se sufre mucha presión, mobbing y ellos no quieren que se vea su angustia porque se interpreta como una debilidad. Por eso puede ser útil que un desconocido les escuche", comenta Conchi Esparta. "Hay mucha gente con un déficit de relaciones personales, en las clases alta hay mucho maltrato sumergido, es tela marinera. En todos los sitios cuecen habas y la angustia puede estar relacionada con cualquier cosa", corrobora Marijose.

La necesidad del servicio es un hecho. Las llamadas han pasado de 125.000 en 2011 a más de 140.000 en 2012. Y el número de personas que participa en cursos supera las diez mil. La obsesión es que la ayuda que prestan sea eficaz y de ahí surge el empeño por formarse y por participar en talleres de autoestima. Ser capaces de conocerse a si mismos para poder conocer a los demás. Según Marijose, "eso es fundamental porque no puedes dar lo que no tienes y por eso es tan necesario conocerse a uno mismo. Si tú estas mal, no puedes dar al otro lo que te pide".

"Si alguien está desesperado, llama, y al otro lado del teléfono se encuentra con una persona que no ha curado su desesperación o su problema de maltrato, eso es garrafal. Yo, como voluntaria, necesito sanear, hacer las paces con mi historia y mi vida para poder ayudar a los demás. No se ayuda solo con buena voluntad, sino con capacitación", aclara Inés Echévarri.

"En los cursos de autoconocimiento hay gente que dice pero cómo he podido vivir yo sin libro de instrucciones", precisa Carlos García. "Cuando asistí al curso de autoestima, iba muy sobrado. Nos parece que vamos por la vida con mucha inteligencia emocional, que podemos con todo y luego, a la primera de cambio, nos caemos con todo el equipo. Pero no lo sabemos hasta que nos caemos y es mejor no llegar hasta ahí", añade Carlos. "Es más fácil hablar con una persona desconocida que quizá comentar con el resto de la familia que, por ejemplo, tu marido te maltrata. En el teléfono nunca se le va a decir tú aguanta, se le va a enseñar a pensar y a derribar los muros que tiene", resume Carlos García.

Las ideas se agolpan sobre la mesa bajo un mismo presupuesto. "Al que llama hay que decirle, yo confío en ti, pero tú tienes que confiar en ti mismo", dice Fátima. "Y llame quien llame, tienes que dejarle muy claro que él tiene sus propios mecanismos para afrontar su vida. Tú solo tienes que enviarle fuerza. Antes, el teléfono estaba lleno de voluntarismo y no se miraba con amplitud los problemas humanos. Se ofrecía un servicio con carácter voluntarista y con un enfoque más religioso", matiza Inés, quizá recordando aquellos primeros inicios de 1967 cuando el teléfono nace en Bizkaia de la mano de los padres franciscanos de Irabalarri.

Pensar en positivo

"Tú eres el que tienes el poder para montar tu propia vida"

Los pensamientos positivos son siempre el leitmotiv de estos voluntarios que aspiran a despertar lo mejor de uno mismo. "No te tienes que agobiar por los demás. Lo que hay que pensar es que tú tienes el poder para montar tu vida y que tu jefe, tu marido o tu vecino, solo tienen el poder que tú les des", apuntala Marijose. "Yo hago la equivalencia entre el aparato emocional y el digestivo. En el digestivo hay que ingerir, masticar, digerir y luego eliminar. En el emocional, algunos digieren y no lo eliminan. Y la escucha activa favorece la eliminación de ese maremágnum", reafirma.

"La ventaja es que el teléfono te enseña a identificar. Igual tú tienes el estómago fatal y resulta que eso que tienes en el estómago es consecuencia de las emociones que tienes dentro porque el cuerpo tiende a somatizar", improvisa Carlos.

Con estos conocimientos, están ya ansiosos por empezar. "Yo tengo muchas ganas de abrir la línea telefónica. Además veo al equipo con mucha motivación. Ahora necesitamos un local, un sitio de referencia donde comenzar a funcionar", reivindica Fátima. Conchi expresa más recelos. "A mí todavía me da miedo enfrentarme al teléfono, por eso sigo preparándome aunque creo que la tarea más importante empieza por saber escuchar".

Y es que pasado este periodo de formación, el teléfono podrá adquirir una identidad, unos dígitos concretos, y un servicio que dar las 24 horas del día los 365 días del año. "Queremos abrir a finales de año, el equipo ya lo tenemos, ahora buscamos locales y recursos económicos". Todo con tal de emular aquel ímprobo trabajo del padre Jesús Biain, que anunciaba el servicio con un sobrecogedor, a la par que eficaz eslogan: Antes de suicidarse, llame.

viernes, 15 de marzo de 2013

Próximas Actividades en Almendralejo y Mérida.

 ACTIVIDADES  TELÉFONO DE LA ESPERANZA EN ALMENDRALEJO Y MÉRIDA

ALMENDRALEJO:

INTELIGENCIA EMOCIONAL:

FECHA COMIENZO: Lunes 8 de Abril a las 18’30 horas

DURACIÓN: 10 sesiones en grupo de periodicidad semanal

REQUISITOS: RELLENAR FICHA.

MATRICULA: 20 €.

INGRESAR  UNA VEZ RELLENA LA FICHA EN LA CUENTA

        2010 0000 93 0021230100 (Caja Badajoz).

PONER EN CONCEPTO: Inteligencia emocional.

DADO EL NÚMERO LIMITADO DE PLAZAS SE RESPETARÁ EL RIGUROSO ORDEN DE INSCRIPCIÓN

Información e inscripciones: 924 22 29 40   badajoz@telefonodelaesperanza.org

Centro Cívico. C/Mérida, nº 11. Almendralejo.

 

MÉRIDA:

APRENDER A ENCAUZAR LAS EMOCIONES:

FECHA: Lunes  8 de Abril a las 18´30 horas.

DURACIÓN: 12 sesiones en grupo de periodicidad semanal

REQUISITOS: RELLENAR FICHA.

MATRICULA: 20 €.

INGRESAR  UNA VEZ RELLENA LA FICHA EN LA CUENTA

        2010 0000 93 0021230100 (Caja Badajoz).

PONER EN CONCEPTO: Aprender a encauzar las emociones.

DADO EL NÚMERO LIMITADO DE PLAZAS SE RESPETARÁ EL RIGUROSO ORDEN DE INSCRIPCIÓN

Información e inscripciones: 924 31 38 87  badajoz@telefonodelaesperanza.org

C/ José Martínez Ruiz Azorín 36, Port 6, Bjo C. de Mérida.

Horario de Lunes, Miércoles y Viernes de 9’00 a 13’00.

 

 

Asociación del Teléfono de la Esperanza en Badajoz.

C/ Ramon Albarran 15, 1º Dch. Badajoz.  924 22 29 40

badajoz@telefonodelaesperanza.org

http://amigostex.blogspot.com

miércoles, 13 de marzo de 2013

CONTROL DEL ESTRÉS Y LA ANSIEDAD" EN EL TE DE BADAJOZ"

   El pasado fin de semana ,del 8 al 10 de Marzo,tuvo lugar en nuestra sede de Badajoz,la celebración del Curso "Control del Estrés y la Ansiedad",impartido por el Teléfono de la Esperanza de Badajoz. Un curso eminentemente práctico,que aporta soluciones concretas a la terrible plaga del estrés y la ansiedad en nuestras sociedades avanzadas.
   El Curso se desarrolló en un ambiente fenomenal,donde la comunicación serena y relajada junto a la alegría y buen ambiente entre los participantes,primaron sobre cualquier otra consideración. En la foto podemos ver la satisfacción de los participantes en el mismo.                                                                                      
   Con este Curso el Teléfono de la Esperanza de Badajoz pretende dar,como siempre,una respuesta concreta al problema de la ansiedad,que cada vez afecta a más personas,mucho más en momentos de crisis económica grave como la que padecemos actualmente.Queremos aportar nuestro granito de arena para ayudar a tantas personas que se ven abocadas a situaciones de gran sufrimiento por causa del estrés y la ansiedad.

CURSO

martes, 12 de marzo de 2013

MEMORIA 2012 DEL TE DE BADAJOZ

Querido/a amigo/a:

Me complace presentarte esta memoria de nuestras actividades a lo largo del año pasado 2012, así como de los recursos de todo tipo que ofrecemos y de los que disponemos. Pensamos que una ONG como la nuestra debe ofrecer a todos sus colaboradores y amigos/as una información veraz y transparente, entre otras cosas para que más que nunca es necesario dar a conocer nuestra labor y para tener una visión global y de conjunto de nuestra Asociación. Aprovecho también para agradecerte, en nombre de todo el equipo del Teléfono de la Esperanza de Badajoz, tu colaboración a lo largo del año, tanto como voluntario, como donante económico o respaldando nuestras actividades con tu presencia y participación. Sin vosotros/as, nada de lo que aquí se detalla habría sido posible llevarlo a cabo. Sois el principal pilar del Teléfono de la Esperanza, sin el cual tantas personas que ahora se benefician de nuestra actuación no podrían hacerlo. También queremos agradecer a las entidades públicas y privadas su colaboración con el Teléfono de la Esperanza. La sensibilidad social de las mismas hacia los más necesitados hace también posible nuestra labor.

Este año 2013 supone para el Teléfono de la Esperanza de Badajoz un año especial, en noviembre de 2013 cumpliremos 40 años, en los cuales hemos estado sirviendo a la sociedad, haciendo lo mejor que sabemos hacer, Escuchando en la Crisis y promocionando la Salud Emocional, entre otras cosas el Teléfono de la Esperanza se ha convertido en estos 40 años en un referente en la prevención del suicido, y queremos agradecer a todos los voluntarios, colaboradores, donantes y socios ecónomicos, e Instituciones que durante estos 40 años nos han ayudado a Crecer y consolidarnos, y quizá también sea el momento de continuar dicho esfuerzo en estos momentos tan difíciles para toda la sociedad. Esperando que este documento que tienes en tus manos sea de tu agrado y te ayude a descubrir un poco más al Teléfono de la Esperanza, aprovecho la ocasión para enviarte un cordial y afectuoso saludo en nombre de todo el Equipo del Teléfono de la Esperanza de Badajoz.

Miguel Ángel Hernández Rodríguez.

Pte. del Teléfono de la Esperanza de Badajoz

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viernes, 8 de marzo de 2013

El Teléfono de la Esperanza pacense, el que más llamadas recibe en España

La Cronica de Badajoz

En el 2012, los voluntarios atendieron casi 13.300, un 14% más que el año anterior. También crecen los usuarios presenciales de los servicios jurídico y de psicología

 Miguel Angel Hernández y María José Cuevas, psicóloga, ayer.</b> Miguel Angel Hernández y María José Cuevas, psicóloga, ayer.Foto:OTO

El Teléfono de la Esperanza de Badajoz fue de los 26 que funcionan en España el que más llamadas recibió el año pasado: 13.281, lo que supone un 14% más que en el 2011. Este fue uno de los datos que ayer dio a conocer su presidente, Miguel Angel Hernández, al hacer balance de la actividad de la oenegé en el 2012.

El hecho de haber sido el más activo del país deja dos análisis bien distintos, según reconoció Hernández: uno positivo pues demuestra la confianza de las personas que recurren al Teléfono de la Esperanza en los voluntarios de Badajoz, y otro negativo, pues más llamadas significan que mayor número de personas tienen problemas.

La principal causa que lleva a los usuarios a recurrir a este servicio sigue siendo la soledad y los momentos puntuales de angustia, aunque las llamadas por problemas relacionados con la crisis, como el desempleo, han crecido un 30%. Para dar respuesta a la situación que muchos ciudadanos viven a causa por el actual momento económico, a finales del 2012 el Teléfono de la Esperanza puso en marcha un nuevo servicio de orientación laboral para desempleados, que ya ha atendido a 15 personas.

Está previsto que este servicio también se pueda prestar en las sedes de Mérida y Almendralejo.

El año pasado no solo aumentaron las llamadas, también se incrementaron las consultas en los departamentos jurídicos (24 casos atendidos) y de psicología (135), al frente de los que están especialistas. En total se realizaron 859 entrevistas personales, un 38% más que en el 2011.

Además de la labor de escucha y el apoyo jurídico y psicológico, el Teléfono de la Esperanza lleva a cabo a lo largo del año grupos de apoyo y talleres para intervenciones específicas --de duelo, dirigidos a personas que sufren una enfermedad crónica y para personas que cuidan de dependientes--, así como otros para fomentar la salud emocional --desarrollo personal, autoestima, inteligencia emocional...--.

Asimismo, la oenegé tiene un programa permanente de formación del voluntarios. En estos momentos cuenta con unos 50 colaboradores pero, según su presidente, siempre "son necesarios más", puesto que el teléfono 902 500 002/924 222 940 funciona las 24 horas del día durante los 365 días del año. Por ello, ahora se ha puesto en marcha una campaña de captación de voluntarios y de socios (con una cuota de 40 euros al año).

martes, 5 de marzo de 2013

TRATARNOS BIEN O EL PLACER DE LA AUTOCOMPASIÓN

 “La paz que ha de hallarse dentro de uno se encuentra en el mismo lugar en el que se ubican la agitación y el sufrimiento.

No ha de hallarse en el bosque ni en la cima de la colina, ni es otorgada por un maestro. Donde usted experimenta sufrimiento puede encontrar la emancipación del sufrimiento. En realidad, tratar de escapar del sufrimiento es, de hecho, correr hacia él”

(Ajahn Chah)

   Tratarme bien, ser gentil con uno mismo suena tan sencillo, resulta tan evidente su importancia, es una actitud tan determinante para el  propio bienestar y de quienes nos rodean, y sin embargo, a pesar de su simpleza no resulta nada fácil de practicar.

Las exigencias y el estrés en el mundo moderno se traducen también en autoexigencia, en un sentido crítico y enjuiciador hacia nosotros mismos; además, en el camino de nuestras vidas vamos experimentando sufrimientos, pérdidas y decepciones que nos ponen a prueba, en muchos de esos momentos de dificultad aprendemos a ser severos y autocríticos con nosotros mismos, pudiendo llegar a ser incluso violentos: “¡Qué estúpido soy!, hasta cuando”, o “¿Por qué me pasan estas cosas a mi?” o “No soy digno de que me quieran”,  pueden ser algunas de las expresiones que usamos con nosotros mismos. Sin darnos cuenta, podemos haber establecido un modo dañino de relacionarnos con nosotros mismos.

Las prácticas de atención plena son una oportunidad para observar el modo en que me estoy relacionando conmigo mismo. ¿Qué frases o ideas me estoy repitiendo continuamente? Con mis acciones y hábitos ¿Qué emociones estoy cultivando? ¿Cómo me estoy tratando?

             Tratarme bien, ser amable y comprensivo con uno mismo es una actitud que podemos decidir cultivar, y es una alternativa especialmente relevante de practicar en momento de dificultad, cuando emerge nuestro crítico más severo, nosotros mismos, haciendo que el sufrimiento también aumente.

Ser amables y comprensivos con nosotros mismos no es sinónimo de autoindulgencia o de estar centrados en nosotros mismos. Ser amables con nosotros mismos nace de reconocer nuestra humanidad compartida, al ser conscientes de nuestra vulnerabilidad y ser respetuosos con ella, aparece la necesidad de tratarnos igual de bien que aquellos a los que más apreciamos, es decir, reconocer que no somos ni superiores ni inferiores a nadie, sino semejantes, formamos parte de la humanidad y de la vida entera.

Hoy existe mucha evidencia científica de los beneficios de la gentileza y compasión con uno mismo. Las personas que se tratan bien a sí mismas tienen también un mayor bienestar, poseen una menor ansiedad, depresión, enfado y una mayor inteligencia emocional.

Ser críticos y enjuiciadores de nosotros mismos hace más probable también que adoptemos esas mismas actitudes con quienes nos rodean, nos demos cuenta o no de ello. De modo similar, cultivar el ser gentiles y compasivos con nosotros mismos nos abre las puertas a tener esa misma actitud hacia quienes nos rodean, repercutiendo favorablemente en nuestras relaciones interpersonales. Observar con gentileza nuestros errores y dificultades permite abrir un espacio para empatizar con quienes están a nuestro alrededor. Una respuesta compasiva con nosotros mismos nos ayudará a responder al sufrimiento emocional de otros con bondad, en vez de con crítica o culpa.

Práctica

Utilizando la metáfora del jardinero expresada por el monje Vietnamita Thich Nhat Hanh, la práctica que les proponemos consiste en hacer presente aquellos aspectos que nos nutren, nos revitalizan. En la metáfora del jardinero esto se realiza regando las semillas de bienestar en nosotros mismos, y sólo nos tomará un par de minutos.

Puedes sentarte un momento y traer tu atención gentilmente a tu momento presente…prestando atención a tu respiración y a las sensaciones corporales de este instante… Mantente unos segundos respirando…

Luego, puedes hacer presente los aspectos que te nutren y vitalizan hoy, y puedes verlos como semillas que puedes regar en ti mismo o en ti misma… puedes permitirte sentir las sensaciones de natural descanso, alegría, serenidad, bienestar, o lo que sea que surja, sin hacer ningún esfuerzo en especial… o simplemente puedes sentir la natural estabilidad y ritmo de la respiración.

Permítete por un momento prestarle atención a esos aspectos que se vuelven presente en ti mismo, permítete regar con la energía de tu atención aquello que aprecias y que ya posees…

Manteniendo atención a lo que surja, ahora podrías reconocer algunas acciones hábiles, que estén dentro de tu influencia realizar y que te permitan regar estas semillas de bienestar. ¿Qué pequeña acción podría ser significativa para incrementar tu bienestar? Puedes incluir  hacer o dejar de hacer algunas actividades que generen bienestar en ti y a quienes te rodean, ¿Cuál sería el primer paso? Si gustas podrías escribirlo y luego poner manos a la obra…

Para concluir, permite sentir algunas respiraciones, apreciando el milagro de estar vivo, en el lugar en el que estás, quizás agradeciéndote el haberte regalado esta Pausa de atención.

lunes, 4 de marzo de 2013

Exposición “Siempre hay motivos para la esperanza” en Alicante

 

Foto de Exposición “Siempre hay motivos para la esperanza” en Alicante

El Centre d´Art Taller d´Ivars acoge la exposición “Siempre hay motivos para la esperanza”, del Programa Circuito Solidario de la Diputación de Alicante, organizada por la Asociación Internacional del Teléfono de la Esperanza, en la que han colaborado el Área de Servicios Sociales de la Diputación y la Concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Benissa.

El 23 de enero tuvo lugar la inauguración oficial a la que asistieron la concejala de Servicios Sociales, Raquel Soliveres; la jefa técnica del Área de Servicios Sociales de la Diputación de Alicante, Patricia Vallés; y el director de la Asociación Internacional del Telefono de la Esperanza, Juan López.

Los asistentes pudieron disfrutar de una conferencia titulada “Semillas para la esperanza” y de la proyección audiovisual “Sembrando esperanza”. También encontraron unos paneles explicativos en la entrada a la sala.

La exposición tiene como objetivo reflexionar sobre la idea de la salud mental como “un estado de bienestar en el cual el individuo se da cuenta de sus propias aptitudes, puede afrontar las presiones normales de la vida, puede trabajar productiva y fructíferamente y es capaz de hacer una contribución a la comunidad”. La Asociación Internacional del Teléfono de la Esperanza es una entidad de acción social y de cooperación, pionera en la promoción de la salud emocional de las personas en situación de crisis.

viernes, 1 de marzo de 2013

Celebración del IV Festival de coros en Granada a favor del Teléfono de la Esperanza

El pasado 26 de Diciembre celebramos el IV Festival de Coros a favor del Teléfono de la Esperanza en el teatro Isabel La Católica. Presentado una vez más por Mª Teresa Ariza, fue todo un éxito de calidad ofrecido por las cuatro agrupaciones participantes (Coro  San Alfonso, Coro Santa Teresa, Agrupación musical San Roque y Más Anchos Que Panchos).

Fue un placer escuchar una magnífica colección de villancicos, unos tradicionales, otros granadinos, y alguno estreno, más disfrutar del buen ambiente de humor que generan siempre el grupo Más Anchos Que Panchos. Al final del acto, la presidenta del Teléfono de la Esperanza de Granada, Lola López Justicia, hizo entrega a cada uno de los directores de los grupos participantes de una placa de agradecimiento por su participación.

Una vez más agradecemos, en nombre del Teléfono de la Esperanza y de todas las personas que se siente ayudadas con el mismo, la generosa participación de los coros, así como la asistencia del público en general y de los muchos "simpatizantes" del Teléfono en Granada